Ricardo Gutman
Para Gabriela y Alicia, que les sobra la paciencia.
Antes, cuando llovía, me daba por escribir. Hoy, cuando llueve, me da por mirar la lluvia. Y escucharla como suena entre el follaje, cuerda vocal del agua que cae en el viento. Cuando digo antes estoy hablando, como mínimo, diez años atrás, quizás no tanto. Cuando digo hoy estoy hablando del pasado lunes. Nombrar el día no me excusará pero confío en que hará más comprensible mi demora.
Muchas cosas han cambiado en mí desde entonces y otras han permanecido intactas, es probable que la combinación de estos factores hayan configurado de manera solapada la demora de la que estamos al tanto.